Seguro que estamos de acuerdo en que la luminosidad es clave para la decoración del hogar. La gente busca luz natural, los decoradores buscan luz natural y cada vez vemos más diseños de casas con amplios ventanales que no se pierden ni un rayo de sol. Al fin y al cabo…la luz es vida.
Por eso, algo importantísimo es tener una buena iluminación en tu dormitorio, y no hablo de la artificial (que también es importante) sino de la natural.
Luz artificial y luz natural
La luz artificial es totalmente necesaria en nuestro dormitorio ya que, lo usaremos con un fin principal, descansar, y normalmente la hora de descanso es cuando la luz natural se ha ido para dejar pasar a la noche. Por eso una buena iluminación artificial es indispensable para poder hacer vida en esa estancia cuando no hay luz natural, como ver la tele, leer o buscar a ese mosquito que a media noche no nos deja dormir.
Pero la luz natural hay que aprovecharla al máximo posible, y aunque es cierto que todo dependerá de las ventanas que posea la habitación también es cierto que hay ciertos trucos para hacer que la luminosidad del dormitorio aumente. ¿Te apetece si los vemos?
Utiliza el blanco, pero juega con él
El blanco es un color de por sí muy usado en la decoración, tanto por la pureza que transmite como por la intensificación de la luminosidad. El color blanco potencia la luz y la refleja.
Pero no hace falta que nuestra habitación sea 100% blanca, sino que podemos jugar con distintas texturas para el blanco, algunos colores en complementos como bien podrían ser cojines o por ejemplo detalles en madera como podrás ver al final del artículo.
Al final, la combinación perfecta es aquella que te haga recibir esa brisa de luminosidad pero sin que desaproveches una bonita combinación de colores que le den personalidad a nuestra habitación.
Un espejo que refleje la luz y la proyecte
Colocar un espejo en una habitación dormitorio o en una habitación juvenil es una excelente idea, ya sea colgado o de pie. La idea de esto es por un lado, reflejar la luz y por otro lado reflejar el blanco, es decir… que intensificamos la luminosidad.
Eso si, si quieres estar un poco alineado con el feng shui, no coloques el espejo delante de tu cama o en un lugar donde te reflejes mientras duermes ya que, según el sistema filosófico feng shui, esto nos impediría descansar correctamente ya que, nuestra energía estaría viajando toda la noche. Creas o no en el poder del feng shui, por lo menos tenerlo en cuenta.
Elige bien tus cortinas
Si queremos tener mayor luminosidad en nuestro dormitorio tendremos que o suprimir las cortinas (lo cual no lo recomiendo) o poner unas cortinas finas que dejen pasar toda la luz.
Como tenemos persianas, estas pueden bajarse si queremos la ausencia total de luz, pero en la mayor parte del día buscaremos luminosidad, y para ello necesitamos o correr las cortinas (lo cual puede no ser una buena idea si tenemos a vecinos cotillas) o poner unas cortinas que sean lo suficientemente finas para dejar pasar la luz sin permitir que los vecinos nos puedan ver. Los estores son también una muy buena idea para este objetivo.
Y por supuesto, si el color de estas cortinas es blanco, ayudaremos a darle una mayor luminosidad
Evita colgar demasiadas cosas en las paredes
Este punto está muy relacionado con el primero, el de utilizar el blanco.
Si nuestra habitación es blanca y queremos mayor iluminación, deberemos prescindir de colgar demasiadas cosas en las paredes, de esta forma el blanco nos dará esa amplitud sin nada que se interponga.
Esto no quiere decir que tus paredes tengan que estar 100% desnudas y que tengas que arrancar los armarios, sino que sabiendo esto, juegues con la decoración de tal forma que la habitación tenga ese equilibrio que necesitas entre luminosidad y decoración.
Un ejemplo de habitación luminosa
Este dormitorio podría ser un ejemplo de una habitación que cumple con las premisas comentadas en el artículo.
Por un lado tenemos una habitación pintada de blanco, con el suelo de tarima con tonos claros. El mobiliario es de color blanco brillo pero tiene el acabado del cabecero así como el del frontal del mueble, de color madera. Lo cual le da un toque de calidez a la decoración sin perder la luminosidad.
E incluso tenemos un espejo para potenciar la luminosidad y el color blanco. Como ves, no está en frente de nosotros para no interponerse al feng shui, pero si que está en la composición de la habitación.